Fiscalidad para colaboraciones con influencers

Las colaboraciones con influencers se han convertido en una herramienta esencial del marketing digital, pero su creciente popularidad ha puesto el foco en su regulación fiscal. Tanto marcas como creadores de contenido deben conocer sus obligaciones ante Hacienda para evitar sanciones.

Estas campañas, ya sean a cambio de dinero, productos o servicios, pueden generar rendimientos sujetos a declaración. Facturación, retenciones, IVA y categorización como actividad económica son aspectos claves.

La Agencia Tributaria ya vigila estos ingresos, por lo que transparencia y cumplimiento son imprescindibles para operar con seguridad jurídica en un entorno digital en constante evolución.

Fiscalidad para colaboraciones con influencers: Obligaciones y tratamiento tributario en España

En los últimos años, las colaboraciones entre marcas e influencers se han convertido en una herramienta clave del marketing digital. Sin embargo, estas relaciones no solo implican aspectos comerciales y contractuales, sino también importantes consideraciones fiscales tanto para el influencer como para la empresa contratante.

En España, la Agencia Tributaria (AEAT) ha aumentado la supervisión sobre los ingresos generados a través de plataformas digitales y redes sociales, por lo que es fundamental entender cómo se deben declarar estos pagos y qué obligaciones derivan de ellos.

El tratamiento fiscal depende de la naturaleza de la relación (autónomo vs. asalariado), el tipo de contenido promocional, la emisión de facturas y el cumplimiento de obligaciones como la retención de IRPF. Tanto la marca como el influencer deben actuar con transparencia para evitar sanciones, manteniendo documentación adecuada que respalde los pagos y la justificación del servicio prestado.

Obligaciones fiscales del influencer como autónomo

Cuando un influencer realiza colaboraciones de forma habitual y con ánimo de lucro, debe darse de alta en el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA) y tributar por el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) en el régimen de estimación directa o simplificada, dependiendo de su facturación.

Cada pago recibido por una marca debe ser facturado correctamente, incluyendo datos fiscales, IVA (si procede) y la retención de IRPF que corresponda (habitualmente del 15% si el influencer está dado de alta como autónomo).

¡Este contenido te puede interesar!Fiscalidad de autónomos: guía clave

Además, debe llevar una contabilidad básica, presentar los modelos 303 (IVA) y 130 (rendimientos de actividades económicas trimestrales), y declarar todos sus ingresos en la declaración anual del IRPF. El incumplimiento puede derivar en inspecciones fiscales, recargos y sanciones administrativas.

Retenciones y obligaciones de la empresa contratante

La empresa que contrata a un influencer tiene obligaciones fiscales claras, especialmente en lo relativo a retenciones de IRPF. Si el influencer está dado de alta como autónomo, la marca debe aplicar una retención del 15% sobre el importe bruto del servicio antes de realizar el pago.

Esta retención debe ingresarla en Hacienda a través del modelo 111 y justificarla como un gasto deducible en su contabilidad. Si el influencer no está dado de alta como autónomo, la empresa podría enfrentarse a problemas legales, pues estaría facilitando una actividad económica no declarada.

Además, se recomienda firmar un contrato de servicios que detalle el alcance del trabajo, la remuneración y los derechos sobre el contenido, lo que facilita la justificación fiscal ante posibles auditorías.

Tratamiento del IVA en colaboraciones con influencers

En la mayoría de los casos, las colaboraciones con influencers están sujetas al Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA) en España, siempre que el influencer esté dado de alta como autónomo y preste un servicio de promoción o publicidad.

El tipo impositivo aplicable suele ser del 21% (tipo general), salvo que el servicio tenga alguna exención específica, lo cual es poco común. La marca, al recibir la factura del influencer, puede deducirse el IVA soportado si el servicio está directamente relacionado con su actividad económica.

Es fundamental que la factura incluya correctamente el IVA desglosado, la base imponible, el tipo aplicado y los datos fiscales completos de ambas partes. La ausencia de IVA en facturas o pagos en negro puede derivar en sanciones para ambas partes por fraude fiscal.

Concepto	Responsable	Observaciones clave
Facturación del servicio	Influencer	Debe incluir datos fiscales, base imponible, IVA (21%) y retención (15%)
Retención de IRPF	Empresa contratante	Aplicar 15% si el influencer está de alta en RETA
Autofactura (caso especial)	Empresa	Si el influencer no factura, la empresa debe emitir una autofactura y hacer la retención
Declaración del IVA	Empresa e influencer	El influencer declara el IVA repercutido (modelo 303); la empresa, el soportado
Deducción del gasto	Empresa	Sólo si el pago está documentado con factura válida y es necesario para la actividad

Claves fiscales que todo influencer y marca deben conocer en sus colaboraciones

Las colaboraciones entre marcas e influencers han crecido exponencialmente, pero muchas veces se ignoran las implicaciones fiscales que conllevan. Tanto el influencer como la empresa deben entender que el pago por contenidos promocionales constituye una prestación de servicios, por lo que genera obligaciones tributarias.

¡Este contenido te puede interesar!Cambios en fiscalidad para 2025

El influencer, en la mayoría de los casos, debe declarar esos ingresos como actividad económica, ya sea como autónomo o bajo otro régimen según su situación, y emitir factura con IVA cuando aplique.

Por otro lado, la marca, al contratar a un influencer, puede tener la obligación de retener IRPF si el colaborador está dado de alta en Hacienda, y además debe registrar los pagos como gasto deducible siempre que exista justificación válida. Ignorar estos aspectos puede derivar en sanciones por parte de la Agencia Tributaria, por lo que es fundamental cumplir con la normativa vigente.

Declaración de ingresos por colaboraciones como influencer

Todo influencer que recibe pagos a cambio de promociones debe considerar esos ingresos como rendimientos del trabajo o del capital, dependiendo de la naturaleza del contrato, y declararlos ante la Agencia Tributaria.

Si actúa como autónomo, debe llevar un libro registro de ingresos y presentar declaraciones trimestrales del IVA y modelos como el 130 o 131 si supera ciertos umbrales.

Además, los ingresos obtenidos a través de plataformas digitales también deben ser incluidos, ya que Hacienda puede obtener esta información mediante intercambio automático de datos. La omisión de ingresos puede derivar en inspecciones tributias y sanciones importantes.

Obligaciones de facturación en campañas publicitarias

Cuando un influencer presta un servicio promocional a cambio de dinero, debe emitir una factura detallada que incluya su nombre, NIF, descripción del servicio, base imponible, IVA (si procede) y retención de IRPF si lo aplica. Esta factura es esencial tanto para el influencer como para la marca, ya que permite a la empresa deducirse el gasto y acreditar el pago ante Hacienda.

Si el influencer no está dado de alta como autónomo, podría tener que realizar la facturación a través del Sistema de Recargo de Equivalencia o bajo régimen de estimación objetiva, siempre que cumpla los requisitos. No emitir la factura correcta puede considerarse una infracción fiscal.

Retención de IRPF en pagos a influencers

Las empresas que contratan a influencers están obligadas a practicar una retención de IRPF del 15% (o del 7% en el primer año de actividad si aplica la reducción) cuando el colaborador actúa como autónomo y presta un servicio sujeto a esta retención.

¡Este contenido te puede interesar!Fiscalidad para pequeñas empresas hoy

Esta cantidad debe ingresarse a través del modelo 111 y comunicarse tanto al trabajador como a la Agencia Tributaria. Es importante verificar que el influencer esté dado de alta en el código epígrafe adecuado en el IAE, ya que esto determina si aplica o no la retención. El incumplimiento de esta obligación puede implicar sanciones para la empresa y reclamaciones fiscales posteriores.

Gastos deducibles para influencers en su actividad

Los influencers que desarrollan su labor como actividad económica pueden deducirse una serie de gastos necesarios y justificados relacionados con su contenido, como equipo técnico (cámaras, luces, software de edición), gastos de internet, desplazamientos a eventos o viajes promocionales, y parte del uso de vivienda si tienen un espacio destinado exclusivamente al trabajo.

Es clave conservar las facturas y documentación que acredite cada gasto, ya que Hacienda puede requerirlas en caso de comprobación. La deducción adecuada de gastos permite reducir la base imponible y, por tanto, la carga tributaria del influencer.

Colaboraciones no monetarias y su impacto fiscal

No todos los pagos a influencers son en dinero: muchos reciben productos, servicios o experiencias a cambio de promoción. Sin embargo, estos beneficios también tienen consideración de ingreso fiscal, ya que constituyen una prestación de valor económico.

El valor del bien o servicio debe incluirse en la base imponible de la factura y declararse como ingreso, sujeto a IVA e IRPF cuando aplique. Si no se factura este tipo de colaboración, se puede considerar ocultación de ingresos. Las marcas también deben registrar estos canjes en sus cuentas como gasto publicitario y, en algunos casos, comunicarlo a Hacienda.

Preguntas frecuentes

¿Qué obligaciones fiscales tienen los influencers al recibir pagos por colaboraciones?

Los influencers deben declarar los ingresos obtenidos por colaboraciones como rendimientos del trabajo o actividades económicas, según su situación. Si superan ciertos umbrales, deben darse de alta en Hacienda y emitir facturas con IVA. También están obligados al pago de IRPF y, en algunos casos, a presentar declaraciones trimestrales (Modelo 303). Es fundamental llevar un control detallado de ingresos y gastos.

¿Cómo deben facturar los influencers a las marcas con las que colaboran?

Los influencers que facturan deben emitir una factura con su número de identificación fiscal (NIF), desglosando el importe, IVA (generalmente al 21%) y el IRPF retenido (15% o 19% según su nivel de ingresos). Deben usar un modelo oficial de factura y conservar copia. Si están dados de alta como autónomos, deben incluir su epígrafe y datos completos. Las facturas deben emitirse en el momento en que se realiza el servicio.

¿Qué gastos puede deducirse un influencer relacionados con sus colaboraciones?

Los influencers pueden deducirse gastos directamente relacionados con su actividad, como equipo tecnológico, software, servicios de gestión, viajes por trabajo, vestuario específico para contenidos o internet y teléfono si se usan para labores profesionales. Es necesario mantener justificantes y que los gastos sean necesarios, reales y proporcionales al uso profesional. Sin documentación, la deducción no será válida ante inspecciones.

¡Este contenido te puede interesar!Fiscalidad verde: beneficios fiscales actuales

¿Están obligados los influencers a pagar IVA en sus colaboraciones?

Sí, los influencers están obligados a pagar IVA si actúan como empresarios o profesionales y están dados de alta en el censo de empresarios. El tipo impositivo habitual es el 21% sobre el servicio prestado. Deben presentar el Modelo 303 trimestralmente y repercutir el IVA a la marca, aunque posteriormente lo ingresan a Hacienda. Si están exentos o bajo ciertos regímenes, pueden no tener esta obligación.

Si quieres conocer otros artículos parecidos a Fiscalidad para colaboraciones con influencers puedes visitar la categoría Fiscalidad.